Pétalo de papel.

Pensando entre cortadas mirando el cielo azul, pintando las paredes sintiendo el olor de las flores recordando el tiempo, viviendo la espeluznante zona.

Sintiendo de nuevo comenzando a vivir, me retiro un tiempo y comienza de nuevo a existir, me caí, y corrí a tus brazos para derramar las lágrimas que me quedaban aun. Camine lento con temor de no volver a caer, estire mi mano y tu me tomaste en tus brazos, me lance al infinito y sentí tu apego cálido, comencé de nuevo a vivir. Es que he partido tantas veces, como un libro, como una historia, nunca esta clara, muchas veces no nos gusta si que arrancamos la hoja y la tiramos comenzamos de nuevo. Y si la vida fuera así, solo un libro en blanco esperando ser completado por las historias que comenzando a vivir de apoco solo empezaron a fluir.
Finalmente me encuentro aquí sentada frente al ferviente mar, frente las frenéticas olas, frente al brillante que sol que nos cobija y nos da calor.
Solo sentaba me encontraba con una hoja en mi mano, con una hoja de papel, leí las tontas historias que escribí alguna vez, me reía sola de lo que pudiese poner, pero mas allá de todo comprendí el sentido que para mi significaba tomar un lápiz y una hoja.

No necesito que comprendas lo que escribo, porque muchas veces es algo que no se comprende, sino que se siente, algo que solo esta retratado en una hoja, en una pagina, en una pintura, o en la literatura

Deborath Ramos.